Desde la Fundación Hogares Juveniles Campesinos esperamos que estos 60 años sean el impulso para seguir construyendo un futuro mejor para los niños, niñas y jóvenes campesinos del país. Por esto, en esta navidad deseamos que la paz llegue a cada puerta de las familias colombianas y se sigan tocando el corazón para aportar en estas obras sociales, que le permiten cumplir los sueños a muchos niños, niñas y jóvenes.
Para este legado siempre ha sido indispensable la educación de los campesinos, por eso, siempre se busca la formación integral de la familia, la promoción de la juventud y las comunidades campesinas del país; para así lograr una educación integral y de calidad, que les permita mejorar sus condiciones de vida.
Por lo anterior, la fundación les agradece a los benefactores, aliados, colaboradores, Hogares, directores, hogareños y a toda la comunidad que sigue haciendo posible cumplir con esta revolución del amor y se espera seguir contando con el apoyo de todos ustedes para seguir construyendo una Colombia mejor.
Este año la Fundación desea que en esta navidad reciban un regalo de amor, paz y felicidad; para que las estrellas se enciendan y sigan luchando por los sueños a cumplir, los proyectos a realizar, algo nuevo para aprender y alguien a quien amar.
¡A todos feliz navidad y próspero año nuevo!